Manifiesto 8 de marzo – Representantes de asociaciones C.A.V.
Si partimos de la definición de “Cuidar” que significa “pensar”, es decir, “poner diligencia, atención y solicitud en la ejecución de algo”, nuestra reivindicación y reclamo tiene mayor sentido, mucho más en este tiempo de pandemia, que ha puesto en evidencia quiénes y qué significa cuidar y cómo es necesario, en una fecha como el 8 de marzo, hacer una reivindicación específica para darle contenido y sentido. Hablamos desde una perspectiva feminista y de las mujeres, especialistas tradicionales en el cuidado y expertas en saber lo que significa este concepto, tanto social, simbólica como económicamente.
Creemos y sabemos que cuidar es mucho más que atender (prestar un servicio),es hacer política, es actuar con premura, visión de futuro, esmero, afecto y vínculo, no solo a las personas, y a las situaciones de la vida, también a las causas estructurales que generan desigualdades discriminatorias de todas las mujeres en sus diversas posiciones y condiciones vitales (migradas, racializadas, rurales, minorías étnicas, edad, diversidad sexual…); de la disparidad en el reparto no equitativo de las oportunidades de desarrollo laboral entre mujeres y hombres, y sobre todo, las desigualdades que sustentan la violencia contra las mujeres en todos sus ámbitos y niveles.
Estas han provocado la invisibilización de las mujeres en el mundo y su papel subordinado debido a cómo el sistema patriarcal nos ha colocado, asignándonos y obligándonos a “entregarnos al mundo (con ilimitación y adhesión inquebrantable) a los otros”, a sus deseos, necesidades… olvidándonos de nosotras mismas y del autocuidado, como uno de los mandatos centrales a las mujeres, haciéndonos creer que entrega y cuidado son sinónimos.
En este 8 de marzo, fecha de reivindicaciones, queremos aportar nuestro análisis para visibilizar y poner de manifiesto uno de los conceptos claves para la consecución de la igualdad de género. “Sin Cuidados igualitarios y equivalentes no habrá igualdad real”, de ahí que sea una de nuestras reivindicaciones centrales.
Queremos poner en valor, desde la revisión y reconceptualización el concepto “de cuidado”, para que la sociedad, en su conjunto, se haga cargo y responsable de esta dimensión humana que ha sido tradicionalmente atribuida a las mujeres, y con ello a su subordinación e invisibilidad. Por ello, desde la definición que hemos propuesto, queremos que sean repartidos y compartidos por la sociedad en su conjunto, así, seguramente, todas y todos podremos contribuir a un mundo más satisfactorio y equilibrado.
Pensamos que una sociedad más igualitaria es posible (si la construimos desde otros pilares), que no podemos mirar a otro lado, sino que es momento de trabajar y estar presente en todos los espacios en los que se puedan generar cambios estructurales y fundamentales.
Reivindicamos que ha llegado el momento de escuchar más atentamente a quienes reclamamos una sociedad socialmente más justa, feminista, sostenible, antirracista, democrática, inclusiva y cuidadora